Las aleaciones de aluminio tienen cierta conductividad eléctrica pero son un poco menos conductoras que el aluminio puro u otros metales altamente conductores como el cobre y la plata.La conductividad eléctrica de la aleación de aluminio se ve afectada principalmente por otros elementos agregados a la aleación, así como por la microestructura y el estado del tratamiento térmico de la aleación y otros factores.
En las aleaciones de aluminio, la adición de algunos elementos de aleación (como cobre, magnesio, zinc, etc.) puede aumentar su resistencia y dureza, pero puede reducir su conductividad eléctrica.Por lo tanto, en algunas aplicaciones que requieren alta conductividad, como cables de dispositivos electrónicos, conductores de baterías, etc., se suele seleccionar aluminio puro o metales de alta conductividad.
Sin embargo, las aleaciones de aluminio todavía se usan ampliamente en muchos dispositivos electrónicos, como teléfonos móviles, computadoras portátiles, tabletas, etc. En estas aplicaciones, las aleaciones de aluminio se usan principalmente para fabricar carcasas y componentes estructurales, en lugar de conducir la corriente eléctrica directamente.Además, la aleación de aluminio tiene una buena conductividad térmica y se puede utilizar en dispositivos electrónicos que requieren una disipación de calor efectiva, como radiadores y módulos de disipación de calor.
En resumen, aunque la conductividad de la aleación de aluminio es relativamente baja, su aplicación en equipos electrónicos aún se basa en su excelente resistencia, ligereza y rendimiento de disipación de calor.