En un movimiento sorprendente, Estados Unidos y China han acordado reducir los aranceles al 10% por 90 días.
El panorama general
Después de meses de tensión y movimientos comerciales de ojo por ojo, Estados Unidos y China han decidido frenar, al menos por ahora.Ambos países acordaron reducir los aranceles existentes a un 10% para los próximos 90 días.Esto es importante, especialmente para las empresas y los consumidores que han estado sufriendo los altos derechos de importación desde que se calentó la guerra comercial.
Entonces, ¿qué está sucediendo realmente?
Esta es la versión corta:
¿Por qué ahora?
No hay una razón mágica, pero fuentes dicen que ambas economías estaban empezando a sentir la tensión, las empresas estaban atascadas en el limbo, las cadenas de suministro se enredaron y la inflación siguió subiendo.Con elecciones en el horizonte en ambos países, calmar las aguas (incluso temporalmente) tiene sentido político y económico.
Lo que esto significa para las empresas
Si usted dirige un negocio que depende de la importación o exportación de bienes entre los EE.UU. y China, esta es su ventana para respirar.Algunas empresas podrían incluso ver un salto en la demanda a medida que los precios se estabilicen.
¿Y para los consumidores?
Puede que no se dé cuenta de inmediato, pero esta medida podría ayudar a frenar los aumentos de precios de artículos cotidianos, desde electrónica hasta electrodomésticos.Podría significar mejores ofertas en el futuro..
No te sientas demasiado cómodo todavía.
En la actualidad, la mayoría de los países de la Unión Europea han adoptado una política de protección de los derechos humanos en el ámbito de la protección de los derechos humanos.y las balanzas comerciales siguen sobre la mesa.
Qué ver después
Los representantes comerciales de ambos países se reunirán nuevamente el próximo mes en Washington. Si esas conversaciones van sin problemas, podríamos ver un acuerdo a largo plazo o al menos una extensión de este aplazamiento de 90 días.
Pensamientos finales
Si bien es demasiado pronto para comenzar el champán, esta reducción de los aranceles del 10% es un paso en la dirección correcta.y señala que las dos economías más grandes del mundo están dispuestas al menos a encontrar un terreno común.
Esperemos que la buena voluntad se mantenga.